El Presidente de la República debe reflexionar sobre varios temas

Sigo creyendo que el Presidente de la República debe reflexionar sobre varios temas, que, con todo respeto, resultan no solo necesarios sino indispensables para enfrentar las consecuencias de la crisis de salud y la económica.

En materia de salud se sigue incrementando el número de contagiados, hospitalizados y muertos junto con la inquietud de la vida de millones que se encuentran en la incertidumbre. Sería conveniente aumentar las pruebas diagnósticas para frenar una epidemia de rápido movimiento, y reducir la transmisión del virus.

Se debería apoyar más a los médicos y demás trabajadores de la salud, se encuentran muy presionados, arriesgando su vida y aceptando insultos y descalificaciones, sin tomar en cuenta que están al frente combatiendo una enfermedad nueva, desprovistos de los medios necesarios ya no solo para enfrentarla, sino para garantizar su propia integridad física, con el riesgo de contaminarse y llevar el virus a su casa.

En materia económica el Presidente debería diseñar y ejecutar una política de apoyo para evitar el cierre de empresas de todos los niveles, ingresos reducidos para cientos de miles de trabajos perdidos. La recesión económica del 2020 arrasa empleos formales, poder adquisitivo disminuido, negocios viables, adelgaza a la clase media, se incrementara el índice de pobreza a 10 o 12 millones de personas.

La economía se encoge, se contrae la inversión privada y extranjera. Millones de mexicanos quedan sin trabajo, sin ingresos, sin seguro de desempleo ni protección social.

Y si le agregamos el tema de la inseguridad, más se agrava el panorama para lograr la recuperación económica, tenemos que reconocer que hay una ausencia de instrumentos institucionales que permitan rescatar a la sociedad de la violencia cotidiana, situación que existe desde hace tiempo, se requiere una verdadera estructura policial en el país.

Sin garantizar la seguridad jurídica en nuestro país difícilmente tendremos inversiones generadoras de empleos.

Los empresarios pueden tomar la decisión de invertir más recursos si perciben que hay seguridad y respeto al estado de Derecho, además de una buena gestión de la crisis y que se están haciendo las cosas correctas para reactivar la economía.

El Presidente debe constituirse en el ejercicio del poder como un legítimo líder que promueva y convoque a un trabajo integral, un compromiso real de todos los miembros de su equipo, formular planes con objetivos claros y concretos, que vayan acorde a la realidad que se vive, independientemente de ideologías, que motive, supervise y difunda el ideal de una esperanza viva y una alegría optimista.

El país se encuentra desde hace meses en el camino de la confrontación política, cuando la situación actual amerita resolver problemas que afectan a todos los mexicanos, se debe convocar a la unidad y al dialogo constructivo a través de una autentica mediación.

El Presidente se ha pronunciado siempre por ser un liberal, por lo tanto, conoce perfectamente el contenido ideológico del pensamiento liberal, sabe que el principal empeño de los ideólogos del movimiento liberal en el poder fue la instauración de un orden constitucional expresado en instituciones que garantizaran la unidad nacional y los derechos ciudadanos.

Vale la pena reflexionar sobre su preocupación, desde aquel entonces, en fortalecer las instituciones, sus estructuras sociales y políticas, a partir de los principios liberales y las aspiraciones republicanas: la división de Poderes y la organización federal.

El orden legal promovido por los gobiernos liberales impuso el respeto al derecho ajeno y consagró principios fundamentales como el sufragio efectivo y las libertades de expresión, de culto y ejercicio sin trabas de las actividades económicas, impulsar la apertura de ideas, debates y opiniones, la educación universitaria y de calidad, la investigación científica.

Ojalá el Presidente de México decida utilizar los cinco créditos otorgados por el Banco Mundial, solicitados por el gobierno de México, para enfrentar los problemas señalados y amortiguar los efectos de las crisis.10