Agradezco a todos mis amigos y amigas que se tomaron la molestia de felicitarme por el día del Padre. Recibí también felicitaciones de mis hijos y de mis nietos. Me permito compartirles con gran emoción los mensajes que me hicieron llegar.

De mi suegra (Carmelita)

Muchas felicidades Victor, que este día lo pases muy contento con nuestra familia. Yo quisiera haber estado ahí con ustedes, pero ya ves que eso es imposible por la situación en la que estoy pasando. Pero desde aquí te envió muchas felicitaciones que te la pases bien. Tomate una copita a mi salud porque ya hace rato que no pasamos por ese camino.

De mi Esposa

47 años de experiencia con 4 maravillosos hijos en un muy buen hogar con un papá y una mamá siempre cuidándolos para hacer de ellos grandes personas, gracias gordito, gracias por todo lo que nos has dado para ser felices. Te quiero

De Chayito

Papi te quiero agradecer por todo lo que has hecho por mí en la vida, siempre has sido mi mejor amigo, mi ejemplo, y mi guía. En todos mis proyectos has estado ahí para impulsarme y siempre has creído en mí. Nunca voy a poder regresarte lo mucho que me has dado y solo espero poder verte siempre feliz y que la vida me dé la oportunidad de tener todo para darte todo lo que tu quieras, así como tú lo has hecho conmigo. Has tenido logros maravillosos en tu vida, pero quiero decirte que además de todo eso has logrado ser el mejor papá del mundo para mí, y sin ti no podría haber logrado nada de lo que tengo. Gracias papi te quiero mucho.

De Jorge

¡Papa deseo que pases un excelente día! Te agradezco todo lo que haces por nosotros tus hijos y sabes que siempre cuentas conmigo. Ahora valoro más nuestras reuniones a comer los Domingos en donde se nos ha dado la oportunidad de convivir. ¡Gracias y espero poder festejarte pronto con una buena carnita asada!

De Victor

Nadie enseña al ser humano a ser padre. La experiencia del hijo forma un criterio sobre qué transmitir u omitir en función de lo vivido. Pero es solo hasta que se tiene la gran responsabilidad de ser padre que se valora la enorme complejidad de esta tarea. Solo el tiempo y la experiencia eventualmente permiten valorar en su justa dimensión los aciertos de los padres; y a entender las limitaciones que su propia condición humana les impone.

En este descubrimiento que lleva toda una vida, y a pesar de las diferencias que puedan haber surgido en el camino, el buen padre deja siempre en el hijo la inconfundible huella de su amor incondicional. Creo que es esto a lo que podemos aspirar los padres, esperando que algún día nuestros hijos entiendan que, a pesar de nuestros errores, siempre prevaleció el afecto y la voluntad de ayudarles a encontrar la felicidad en la vida.

Gracias jefe por tus consejos, por tu ejemplo, por tu tiempo, pero sobre todo por tu afecto. Hoy valoro más que nunca lo que has sido para mí. Te quiero mucho.

Gracias, me hicieron el día, no cabe duda que el aislamiento necesario genera sentimientos que quizás muchas veces no se puedan expresar en las reuniones tradicionales.